Fenadismer exige a Tráfico aplicar el margen de error en las sanciones de velocidad
- La normativa reguladora de los cinemómetros que miden la velocidad establece un margen de error que debe ser descontado de la velocidad con la que se sanciona a un conductor.
- Diferentes sentencias judiciales y el Defensor del Pueblo han instado a Tráfico su aplicación.
La Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (FENADISMER) ha solicitado formalmente al Director General de Tráfico para que inste a sus Jefaturas Provinciales la aplicación de la normativa reguladora de los instrumentos destinados a medir la velocidad de circulación de los vehículos en carretera, la cual establece que dichos cinemómetros poseen un margen de error, el cual debe ser descontado de la velocidad con la que se pretende sancionar al conductor infractor.
FENADISMER viene constatando que, a diferencia de otras Administraciones locales y autonómicas competentes en materia de tráfico, las Jefaturas Provinciales de Tráfico dependientes de la DGT imponen sanciones por exceso de velocidad consignando en la propuesta sancionadora exactamente la velocidad recogida en el cinemómetro y que aparece en la imagen que se remite como prueba, sin descontar los kilómetros de margen de error establecidos legalmente.
Esta actuación de las Jefaturas de Tráfico incide directamente en los transportistas y sus conductores profesionales, al imponer sanciones superiores a las que correspondería y, lo que es más grave, provocando la injusta pérdida de los puntos del permiso de conducir que tal infracción acarrea.
En apoyo de dicha reivindicación, diferentes sentencias judiciales han condenado a la DGT por la no aplicación del citado margen de error en los excesos de velocidad. De igual modo, el Defensor del Pueblo dictó el pasado mes de Enero una recomendación dirigida al Director General de Tráfico instándole a que revisara de oficio determinados expedientes sancionadores por exceso de velocidad al no quedar acreditado que en la que figuraba en el cinemómetro se hubiera descontado el margen de error previsto en la regulación vigente.