Los transportistas europeos se encuentran en una situación de crisis económica debida a los incrementos sucesivos, acelerados y vertiginosas de los precios del gasóleo.

 

De oeste a este y de norte a sur, la profesión está en una situación clara de crispación.

Cualquiera que sea el país afectado, las empresas de transporte se encuentran en la casi total imposibilidad de repercutir a sus clientes la totalidad del sobrecoste actual del gasóleo.

 

Un número elevadísimo de empresas de transporte por carretera trabajan en la actualidad por debajo de sus propios costes de explotación, por lo que miles de transportistas se encuentran en una situación de quiebra.

 

La UETR recuerda el transporte de mercancías por carretera europeo está mayoritariamente constituido por autónomos y pequeñas y medianas empresas, representando así mismo un número elevadísimo de la tasa de empleo del sector.

 

La UETR, en nombre de todas sus organizaciones miembro, realiza un llamamiento a la Comisión Europea para que adopte con carácter de urgencia medidas que permitan asegurar y garantizar la viabilidad de las empresas de transporte europeas.

 

La situación es ya insostenible, con una situación evidente de quiebra económica de las  empresas, por lo que la UETR entiende que a falta de una reacción política de envergadura, se generarán situaciones de huelga y paro del sector de gran importancia y consecuencias, que se extenderán por todos los países de la Unión Europea.

 

En efecto, numerosas asociaciones miembro de la UETR se encuentran en este momento en una situación general de conflicto que puede desembocar en movimientos de mayores consecuencias.

 

España, a través de la organización profesional FENADISMER, socio fundador de la UETR ha convocado ya un PARO NACIONAL de duración INDETERMINADA para el día 8 de junio.

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